Yadier Molina ha jugado 19 temporadas en las Grandes Ligas. Reconoce un balk cuando lo ve y, aparentemente, lo conoce mejor que todo un equipo de umpires.
Los Piratas de Pittsburgh estaban molestos el martes cuando pensaron que habían eliminado a Molina en la segunda base para un final de entrada solo para ver a Molina convencer a los umpires que cantaran un balk. Molina, reconociendo que J.T. Brubaker estaba lanzando desde el stretch, despegó hacia la tercera base una vez que el lanzador de los Piratas comenzó su lanzamiento. Pero Brubaker se detendría a mitad del movimiento (un balk muy claro), saldría de la goma y lanzaría a segunda.
Molina había dejado de correr porque asumió que los árbitros habían llamado balk, y estaba confundido cuando el árbitro de segunda base Dan Iassogna inicialmente lo cantó out en la jugada. Pero cuando Molina analiza las reglas básicas del béisbol, uno escucha. Y el mensaje llegó a los umpires porque se agruparon y dictaminaron que la jugada fue balk.
El manager de los Pirates, Derek Shelton, salió a discutir su caso a pesar de que sabía que era un balk. Su problema fue que todos los umpires se no vieron el balk y solo hicieron la corrección después de que Molina señalara el error.
Aún así, es admirable la forma en que Molina educó a todos los umpires. Sabía que tenía razón. Fue un balk muy obvio.