Iba a escribir esto en mi blog personal pero al tratarse únicamente de asuntos beisboleros mejor lo escribo en el foro y lo comparto con ustedes que son mis amigos en la red.

Les voy a confesar una cosa, yo no soy un tipo, digamos, llorón, de hecho, la última vez que lloré fue cuando lo de mi papá hace ya siete años.

No obstante, este fin de semana solté algunas lágrimas.

Primero, fue ver a Yangervis Solarte siendo ovacionado de pie por todo el estadio en su primer turno al bate en su regreso y fue pensar lo que tuvo que pasar ese muchacho, se me cortaba la respiración. Al final, Solarte fue ovacionado dos veces, la otra fue cuando en ese mismo turno conectó un hit al jardín izquierdo.

https://www.youtube.com/watch?v=LgEaXmtZF-M

Luego vino la despedida de Vin Scully en su última narración en su casa del Dodger Stadium. Vi la ceremonia completa y realmente sentí como se me iba alguien muy cercano.

Yo no sé si Scully es o ha sido el mejor narrador de la historia pero quizás esté ahí ahí en la parte más alta de la lista. Pero es que sentía como si se me iba otra etapa en la vida. Es como que me estoy quedando sin personajes beisboleros, de los que yo conozco desde que era más joven. Sé que hoy en día hay más talento que nunca pero siempre es triste cuando se va alguien que uno reconoce desde muy joven.

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Bueno, y para rematar el domingo, vino esa trágica noticia de la muerte de José Fernández. Aún no me creo que José no esté con nosotros. Sin duda que es un duro golpe para todo el mundo del béisbol, desde sus compañeros, el equipo y la fanaticada. Pero, no seamos egoístas. Si bien nos da rabia que sucedan estas cosas y que el béisbol haya perdido un talento del calibre de José, los que más han perdido son su familia y sus amigos más cercando.

A ellos, su familia, es a los que tenemos que desviar toda nuestra atención.

https://www.youtube.com/watch?v=V8H78UgvsNU

Me hubiese gustado hablar más pero se me iba a hacer muy largo esto. Creo que no hace falta hablar más de lo necesario en estos momentos.

¡Un fuerte abrazo "rompe costillas" para todos!