Durante un emocionante encuentro en el American Family Field de Milwaukee, los Brewers de Milwaukee enfrentaron una controvertida decisión arbitral en el noveno inning que resultó determinante en su juego contra los Rays de Tampa Bay. Con una pizarra adversa de 1-0 y solo un out, Jake Bauers, primera base de los Brewers, estaba al bate con corredores en segunda y tercera base.

El lanzamiento final de Jason Adam, cerrador de los Rays, pasó al catcher suplente René Pinto, lo que inicialmente parecía permitir a Sal Frelick, jardinero de los Brewers, anotar desde la tercera base. Sin embargo, el umpire Ryan Additon declaró a Bauers out por interferencia al bateador, al golpear con su bate el casco de Pinto en el movimiento posterior del swing.

El mánager de los Brewers, Pat Murphy, disputó la decisión, argumentando que la pelota ya había pasado a Pinto antes de que el bate tocara al receptor de los Rays. Murphy fue expulsado del juego por primera vez en su carrera como mánager por protestar esta decisión.

Los Brewers no lograron recuperarse de este contratiempo y finalmente perdieron el juego por 1-0, dejando las bases llenas tras un ponche a Blake Perkins, jardinero central.

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