Es un día triste, triste en el béisbol ya que uno de los más grandes embajadores del juego y una de las figuras más queridas ha muerto. Ernie Banks tenía 83 años de edad.

"Mr. Cub" ("Señor Cachorro" o "Mister Cachorro") (si traducimos su sobrenombre) fue una de las figuras más famosas que el juego ha conocido. Un torpedero e inicialista miembro Salón de la Fama. La cara de una franquicia para múltiples generaciones. Una franquicia más conocida por su futilidad que su éxito, pero que nunca disminuirá o mancillará el legado de su mejor jugador, así como él estableció el récord de más juegos en su carrera jugó sin una aparición en playoffs. Pero eso fue culpa de ellos, no de él. Fue lo suficientemente bueno para ser el mejor jugador de cualquier equipo ganador de la Serie Mundial, pero las circunstancias y la mala fortuna hizo para que el legado de Banks sea una de optimismo más que cualquier otra cosa. Un hombre conocido más por su deseo de "jugar dos" en un cálido día de verano que cualquier cosa que le ha pasado en octubre.

No es que sus hazañas sobre el campo eran nada menos que fantásticas.

Firmó su primer contrato profesional con los Monarcas de Kansas City de las Ligas Negras a la edad de 19. Allí aprendió el juego de con las leyendas, incluyendo Cool Papa Bell, quien lo firmó, y Buck O'Neil, quien fue su manager. Después de una introducción al juego y luego de una temporada en el ejército, bateó .347 para los Monarcas en 1952, capturando los ojos de los Cachorros de Chicago. Cuando se le ofreció un contrato, no quería dejar de Kansas City, citando la lealtad a sus compañeros de equipo y su club. Él se fue, por supuesto - quien no lo haría - y luego se embarcó en una carrera digan del Salón de la Fama de Grandes Ligas.

Banks fue primer jugador negro de los Cachorros y fue segundo de Wally Moon para el Novato del Año en 1954. El año siguiente conectó 44 jonrones, estableciendo el récord de jonrones para un campocorto. Fue el MVP Liga Nacional en 1958 y 1959, liderando la liga en jonrones y slugging en 1958 y liderando la liga en carreras impulsadas en ambas temporadas. Él iba a ganar otra corona de jonrones en 1960 y lideró la Liga Nacional en juegos jugados en 1954, 1955 y 1957-1960. Ganó un Guante de Oro en 1960 también.

En su carrera bateó 512 jonrones en sus 19 temporadas en las mayores, todos en Chicago, y ha escrito una línea de por vida de .274 / .330 / .500. Era un torpedero gran bateo en una época donde no se esperaba que los torpederos batearan. Su bate era tan bueno que, cuando ya no podía manejar la posición debido a problemas de rodilla que se remontan a sus días en el ejército, jugó muy bien en la primera base. De hecho, terminó jugando más encuentros en la primera base en su carrera de lo que lo hizo en el campocorto.

Después de que sus días como jugador terminaron, se desempeñó como, tal vez, el mejor embajador que el juego ha conocido. Sin duda el mejor embajador que los Cachorros han conocido. Nadie que haya cumplido o interactuado con él alguna vez ha compartido una historia negativa sobre el hombre. En 2013 le fue concedido la Medalla Presidencial de la Libertad. Su estatura era tal, sin embargo, que el honor era más probable que el presidente lo conociera que para Banks recibirla.

Béisbol perdió a uno de sus mejores miembros hoy. Pero uno que nunca será olvidado.

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