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MLB
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23 de agosto de 2017 16:39
Hay muchos cambios que han ocurrido y afectan al beisbol de grandes ligas de una manera u otra. Me atrevo a jerarquizar la importancia de esos cambios de la manera siguiente:
1) Internacionalización del beisbol. Sin duda, el beisbol se practica ahora en un número mucho mayor de países. No solo se practica en Estados Unidos, donde se inició, sino en Canadá y muchos otros países de América, así como en Asia, Europa y Oceania. En las grandes ligas, 1/3 de los jugadores son extranjeros y hay peloteros nacidos en 18 países distintos a los Estados Unidos, siendo los dominicanos y los venezolanos los que representan un porcentaje mayor de peloteros extranjeros.
2) Disminución de la popularidad. El beisbol continúa siendo un deporte muy popular en los Estados Unidos, pero esa popularidad es compartida ahora con el fútbol americano, el baloncesto, el soccer y otros deportes. Sin duda, el beisbol ya no tiene la misma popularidad que tuvo a comienzos de siglo XX, en la década de 1920 o en la década de 1950, donde sin duda era realmente el “pasatiempo nacional”.
3) Incremento en el número de ponches y jonrones por juego. Los pitchers lanzan ahora más rápido y los bateadores conectan batazos más largos, lo que se traduce en un crecimiento importante en el número de ponches y jonrones. El número de ponches por juego es hoy más del doble que en 1950 y el número de jonrones por juego ha aumentado más de 60 % desde esa época. Estos cambios parecen incrementar el interés de los fanáticos, pues les agrada ver a los pitchers de su equipo ponchar más jugadores y a los bateadores de su equipo conectar más jonrones.
4) Mejor calidad de la defensa. El acondicionamiento de los terrenos y los implementos de juego (guantes, bates, protectores, etc.) han mejorado mucho y esto, junto con la mejora en la preparación física y los métodos de entrenamiento, se ha traducido en un mejor espectáculo, particularmente en lo que se refiere a la calidad de la defensa. Basta con decir que el número de errores por juego se ha reducido en 40 % desde 1951.
5) Mejores estadísticas. Con el surgimiento de “sabermetrics” y, más recientemente, de tecnologías como Statcast, ha mejorado mucho la evaluación del desempeño de los jugadores y de las técnicas para mejorar su competitividad.
6) Acceso de peloteros negros. Desde 1945 se permite jugar a peloteros negros. Este cambio permitió que en las grandes ligas brillasen peloteros como Willie Mays, Hank Aaron, Barry Bonds, Rickey Henderson, Frank Robinson, Bob Gibson, etc. Pero también es cierto que el porcentaje de peloteros negros nunca ha sido mayor de 20 % y no ha parado de disminuir desde 1994, de manera que este cambio no ha tenido una incidencia muy significativa en el beisbol.
7) Expansión del número de equipos y jugadores. Entre 1961 y 1998 se incrementó el número de equipos de grandes ligas de 16 a 30. Se podría pensar que la calidad ha disminuido debido a la presencia de un número de peloteros mucho mayor; es posible que sea así, pero también hay que tener en cuenta que ahora hay muchos más jóvenes practicando el beisbol y en las ligas menores hay una gran cantidad de jugadores entre los que los equipos mayores pueden escoger. También la preparación física y los métodos de entrenamiento han mejorado mucho, lo que sin duda compensa cualquier efecto negativo de la expansión. Por otra parte, la expansion ha permitido que en varias ciudades de Estados Unidos y Canadá (Dallas- Fort Worth, Denver, Houston, Kansas City, Miami, Phoenix, San Diego, Seattle; Toronto) se pueda disfrutar del beisbol de grandes ligas.
8) Incremento de los salarios. El salario de Babe Ruth en 1930, ajustado a valores actuales, representa alrededor de un tercio del salario promedio actual de los peloteros de grandes ligas. Esto nos da una idea del crecimiento explosivo que han tenido los salarios de los jugadores. Sin embargo, esto no parece haber tenido un impacto significativo en la calidad del juego ni haber representado un atractivo mayor para los jóvenes que otros deportes que también han incrementado considerablemente sus salarios.
23 de agosto de 2017 17:21
Yo agregaría el surgimiento de lanzadores relevistas especialistas y la figura del "súper utility", así como el bateador designado
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23 de agosto de 2017 20:36
sergioesp, post: 44174, member: 15 wrote: Yo agregaría el surgimiento de lanzadores relevistas especialistas y la figura del "súper utility", así como el bateador designado
Sergioesp:
Tienes razon. Esos son cambios importantes.
Aunque el uso de relevistas es bastante antiguo, el de relevistas especializados se inicio en la decada de 1980. El principal efecto de esta especializacion, aparte de darle trabajo a mas lanzadores, es que el numero de carreras anotadas en los tres ultimos innings es 15- 20 % menos que en los seis primeros innings. En particular, con el uso de los cerradores, en el noveno inning se anotan 30 % menos carreras que en el promedio de los ocho primeros innings.
Los jugadores "utility" tambien son muy antiguos, pero los "super utility" son practicamente una invencion de esta decada. En general, se trata de buenos jugadores ofensivos y defensivos que se aprovechan en muchas posiciones, segun haga falta. Por ejemplo, Ben Zobrist, de los Cachorros, ha jugado en esta temporada en 59 juegos en 2B, 29 en el LF y 23 en el RF, y en otras temporadas tambien lo ha hecho en SS, CF, 1B y 3B (solo le ha faltado quechear). Martin Prado ha jugado en su carrera principalmente en 3B, 2B y LF, pero tambien lo ha hecho en 1B, SS y RF. Omar Infante, ya retirado, fue predominantemente un 2B, pero jugo tambien en todas las demas posiciones, con excepcion de C y 1B.
La figura del bateador designado se introdujo en la Liga Americana en 1973. La verdad es que este cambio no ha sido muy significativo, al menos en terminos de ofensiva, a pesar de que los DH son claramente mejores bateadores que los pitchers. En 2017, por ejemplo, el promedio de carreras anotadas por juego en la Liga Americana es apenas 1.3 % mayor que el de la Liga Nacional y el promedio de bateo y el OPS son practicamente los mismos en ambas ligas.
24 de agosto de 2017 07:19
alberto silva, post: 44175, member: 19 wrote: con el uso de los cerradores, en el noveno inning se anotan 30 % menos carreras que en el promedio de los ocho primeros innings.
Es cuando menos contradictorio que el dominio de los cerradores respecto de otros pitchers sea tan notorio y que por otra parte haya tantos casos de cerradores "flor de un día" que lo hacen bien por un periodo de tiempo y después caen en desgracia. Ejemplos sobran: Dyson de los Rangers, los venezolanos Mujica y Gómez, entre otros
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24 de agosto de 2017 15:05
sergioesp, post: 44176, member: 15 wrote: Es cuando menos contradictorio que el dominio de los cerradores respecto de otros pitchers sea tan notorio y que por otra parte haya tantos casos de cerradores "flor de un día" que lo hacen bien por un periodo de tiempo y después caen en desgracia. Ejemplos sobran: Dyson de los Rangers, los venezolanos Mujica y Gómez, entre otros
Sergioesp:
Quizas eso lo que demuestra es que el cerrador es realmente una figura importante en un equipo y que no todos pueden ser cerradores, por lo menos no durante mucho tiempo. Aparte de ser capaz de trabajar bajo presion casi todo el tiempo, un buen cerrador debe tener un buen promedio de K/9. Los 10 cerradores con mas juegos salvados en esta temporada tienen todos entre 11 y 17 K/9, con dos excepciones: Alex Colome (7.44) y Brandon Kintzler (5.43). Quizas estos dos cerradores compensan su falta de ponches con un buen indice de batazos rodados; ellos tienen los dos mayores porcentajes de batazos rodados entre los 10 relevistas identificados. Pero, en todo caso, los cuatro cerradores con mas de 2.0 WAR F-G en esta temporada (Kimbrel, Jansen, Osuna y Knebel) tienen todos entre 12 y 17 K/9. Si tomamos en cuenta que suelen lanzar un inning por juego, esto significa que ponchan entre 1.3 y 1.9 bateadores cada vez que vienen a lanzar; es decir, la probabilidad de que ponchen un bateador contrario es de 30 a 60 %, posiblemente cerca de 50 % en promedio. Jeanmar Gomez tuvo un promedio de 5.61 K/9 en su carrera, Edward Mujica 7.0 y Sam Dyson 7.15. El Kid Rodriguez, por el contrario, tiene 10.53 de promedio en su carrera y supero los 12 K/9 en cuatro temporadas consecutivas (2004- 2007). Mariano Rivera no tuvo un altisimo promedio de K/9 (8.22), pero fue muy consistente y, al igual que Colome y Kintzler en esta temporada, su porcentaje de batazos rodados fue muy alto (52.4 %). En resumen, si usted necesita un buen cerrador busque uno que tenga mas de 11 K/9 o un porcentaje de batazos rodados mayor que 50 %; aun asi, tiene que probar y ver si funciona.
