La temporada 2024 dejó a la AL West como la peor división de las Grandes Ligas, con un balance colectivo de 43 juegos por debajo de .500. Sin embargo, cada offseason trae la esperanza de un nuevo comienzo. ¿Qué tan bien se reforzaron Astros, Rangers, Mariners, Athletics y Angels para cambiar su suerte en 2025?
Houston Astros (C+)
La caída de los Astros fue tan abrupta como inesperada: por primera vez desde 2016, no alcanzaron la ALCS. Su offseason ha estado marcada por decisiones polémicas, como la salida de Kyle Tucker, quien fue cambiado a Chicago tras una lesión que truncó su candidatura al MVP en 2024 (.251 AVG, 26 HR, .803 OPS). A cambio, llegaron Isaac Paredes (All-Star en 2024) y el prospecto Cam Smith.
La firma de Christian Walker (3 años) apuntala las esquinas del infield, pero la incertidumbre rodea el futuro de Alex Bregman, quien rechazó una oferta de $156 millones. Además, la salida del relevista Ryan Pressly sin una mejora clara en el outfield ha generado malestar entre los aficionados.
Con tensiones internas desde la salida del GM James Click, la franquicia parece en transición. Sin embargo, la calidad residual de su roster aún los mantiene como favoritos divisionales.
Seattle Mariners (F)
La ofensiva de los Mariners fue su talón de Aquiles en 2024, liderando las Grandes Ligas en ponches. A pesar de quedarse a un solo juego del comodín, la gerencia optó por una offseason pasiva: renovaron a Jorge Polanco (16 HR, .651 OPS) y firmaron a Donovan Solano, sin realizar movimientos de impacto.
Con una de las rotaciones más talentosas y jóvenes, la falta de inversión ofensiva parece una oportunidad desperdiciada. El enfoque conservador de Jerry Dipoto y la tacañería de la directiva han dejado al equipo estancado.
Texas Rangers (B+)
Tras una defensa del título mundial para el olvido, los Rangers abordaron sus debilidades con determinación. Reforzaron un bullpen que fue el quinto peor en ERA en 2024, incorporando cinco relevistas, incluidos Chris Martin y Hoby Milner.
La ofensiva también se fortaleció con la llegada de Joc Pederson y Jake Burger, mientras que la renovación de Nate Eovaldi (35 años) por tres temporadas es un riesgo calculado. Aunque ningún movimiento fue espectacular, el equipo es ahora más profundo y equilibrado.
Athletics (B-)
La mudanza a Sacramento vino acompañada de un inusual gasto de $70 millones en agentes libres, destacando la firma de Luis Severino (3.91 ERA en 182 IP) y la extensión de Brent Rooker por cinco años.
Aunque estos movimientos no convierten a los Athletics en contendientes inmediatos, muestran una intención de competir. El rendimiento de jóvenes como Lawrence Butler y JJ Bleday será clave para sus aspiraciones en 2025.
Los Angeles Angels (C)
Sin Shohei Ohtani, los Angels siguen resistiéndose a una reconstrucción. Firmaron a Yusei Kikuchi (4.05 ERA, 206 K) y adquirieron a Jorge Soler para añadir poder al lineup. La llegada de Travis d’Arnaud debería apoyar el desarrollo del joven receptor Logan O’Hoppe.
No obstante, el éxito de los Angels sigue dependiendo de la salud de Mike Trout y Anthony Rendon. Sin ellos, el resto de los movimientos son insuficientes para competir en una división cada vez más dura.
La offseason de la AL West fue una mezcla de decisiones audaces y omisiones preocupantes. Mientras que Rangers y Athletics mostraron intención de mejorar, Mariners y Angels parecen haber dejado pasar oportunidades clave. Los Astros, pese a sus polémicas, siguen siendo el equipo a vencer, aunque la distancia con sus rivales podría acortarse rápidamente.