Concluido su segundo año consecutivo con marca de 71-91, los Washington Nationals continúan su lenta salida de la reconstrucción. A pesar de no haber realizado grandes contrataciones, sí concretaron movimientos interesantes con miras a la próxima fase del proyecto.
La incorporación más sonada fue la adquisición vía cambio del primera base Nathaniel Lowe, un bateador zurdo constante que llega tras batear .265/.361/.401 con los Texas Rangers. Aunque no es un toletero clásico, Lowe suma 27 HR en 2022 (temporada de Silver Slugger) y ha mantenido una línea ofensiva sólida. Junto a él regresa Josh Bell como bateador designado con un contrato de un año por $6 millones. Bell, que ya tuvo un gran desempeño con los Nats en 2021-22, mostró signos de recuperación ofensiva en la segunda mitad de 2024 con .292/.379/.506 tras su traspaso a los Diamondbacks.
En total, Washington firmó a nueve jugadores por contratos de Grandes Ligas, todos por uno o dos años. La inversión total fue modesta: $47.5 millones, con solo Trevor Williams recibiendo un contrato multianual (2 años, $14M). El resto, incluyendo al exAll-Star Michael Soroka ($9M), Lucas Sims y Jorge López, llegó como apuestas de bajo riesgo.
En cuanto al bullpen, el regreso del cerrador Kyle Finnegan por $6M (con $4M diferidos) tras ser non-tendered fue sorpresivo pero económico. También destaca el fichaje del japonés Shinnosuke Ogasawara, un zurdo con buena localización, pero escasa velocidad y ponches.
Aunque no se reforzó la antesala con nombres grandes como Bregman o Arenado, se añadieron infielders versátiles como Amed Rosario y Paul DeJong, mientras que el joven José Tena y el prospecto Brady House (ya en Triple-A con solo 21 años) podrían competir por el puesto a lo largo de la temporada.
La rotación proyectada incluirá a Gore, Irvin, Parker, Williams y Soroka, mientras que Cade Cavalli, tras larga recuperación, podría tener oportunidades más adelante. Josiah Gray se perderá la campaña por Tommy John.
En el outfield, no hubo necesidad de movimientos: James Wood, Dylan Crews y Jacob Young representan un trío con control contractual y potencial. La receptoría seguirá con Keibert Ruiz, aunque su desarrollo estancado preocupa tras firmar su extensión en 2023.
Más allá de lo deportivo, Washington resolvió su disputa con los Orioles por los derechos de transmisión de MASN. A partir de 2026, podrán negociar sus propios contratos televisivos, lo cual puede mejorar sus ingresos. También buscan acuerdos por los derechos del nombre del estadio y patrocinios en el uniforme.
Con el contrato de Patrick Corbin finalizado y el de Stephen Strasburg casi fuera del panorama, la franquicia tendrá más libertad financiera en 2026, justo cuando su núcleo joven estará más maduro. El dueño Mark Lerner ya ha insinuado que en ese momento podrían hacer un gasto fuerte.
En definitiva, esta offseason no fue para competir, sino para apuntalar una estructura que empieza a tomar forma. Con el primer pick del draft 2025 en su poder, los Nationals podrían cerrar el ciclo de reconstrucción con una última temporada discreta antes de lanzarse de lleno a competir.
Fuente original:
Artículo de Anthony Franco para MLB Trade Rumors:
https://www.mlbtraderumors.com/2025/03/offseason-in-review-washington-nationals-14.html
Traducción automática al español vía Google Translate:
Traducir artículo