El análisis estadístico del béisbol ha evolucionado hasta el punto en que el promedio de bateo ha perdido protagonismo entre los analistas avanzados. Tom Tango (@tangotiger) lo deja claro en su artículo “Batting Average as a proxy for fun?”, donde plantea una reflexión sobre cuáles son las jugadas más emocionantes en el béisbol y si el promedio de bateo realmente refleja el atractivo del juego.
Los momentos más divertidos del béisbol
Para Tango, el verdadero espectáculo en el béisbol no está en los sencillos o en un número de tres décimas que mide la cantidad de hits conseguidos. Destaca que lo más emocionante del juego incluye:
- El robo de base, o incluso solo la amenaza de que ocurra.
- Un triple electrizante o un jonrón dentro del parque.
- Una gran jugada defensiva, como un lanzamiento preciso de Ichiro Suzuki o una jugada espectacular de Manny Machado.
- Una actuación dominante de un lanzador, como los juegos de Roger Clemens con 20 ponches y 0 boletos.
- El jonrón, sobre todo con corredores en base, por su impacto en el marcador y la emoción que genera.
En cambio, los hits sencillos en el cuadro o los batazos que caen frente a los jardineros no son especialmente emocionantes. Pueden ser importantes en el contexto de un juego, pero no generan la misma pasión que las jugadas mencionadas anteriormente.
¿Necesitamos el promedio de bateo para medir la diversión?
Tango plantea que el promedio de bateo es una estadística obsoleta para evaluar jugadores. Cuestiona la relevancia de ver un .311 en comparación con un .279, sugiriendo que el número en sí no aporta gran cosa en términos de entretenimiento. Si bien reconoce que algunos disfrutan del concepto de hits y de la métrica porque fue una de las primeras que aprendieron en su infancia, no cree que el promedio de bateo deba ser el foco principal del análisis moderno.
De hecho, va más allá: si esta estadística nunca se hubiera inventado, difícilmente habría llegado a la prominencia que tuvo durante años. Quizá ni siquiera sería tan popular como el BABIP (Batting Average on Balls in Play).
Reflexión final
El artículo de Tom Tango no es solo una crítica al promedio de bateo, sino una invitación a repensar cómo consumimos el béisbol. Si lo que buscamos es entretenimiento, quizá debamos fijarnos más en los momentos de impacto y menos en una estadística heredada del pasado. Tango deja claro que él disfruta del béisbol sin necesidad del promedio de bateo, y que su evaluación de jugadores no depende de esta métrica.
Puedes leer el artículo original de Tom Tango aquí: Enlace al artículo original
Si prefieres una traducción automática al español, puedes leerla aquí: Enlace a la traducción