Jordan Hicks no se guarda nada. El lanzador dejó claro lo que piensa sobre el desafío que tienen por delante: “Va a ser un duelo complicado, pero creo que nuestros bateadores estarán bien preparados. Con suerte, podemos aprovechar un bajón tras la Serie Mundial y, este año, conseguir nuestro anillo. No puedes descartarnos contra nadie”.
Mientras tanto, el manager Bob Melvin dejó una reflexión que resuena en todo aficionado al béisbol: “El juego se juega en el campo, no en el papel”. Estas palabras resumen perfectamente lo que representa enfrentarse a los Dodgers, un equipo que siempre saca lo mejor de sus rivales y asegura partidos llenos de emoción e intensidad. “Siempre son juegos muy animados contra ellos y estamos motivados para jugarles”, añadió Melvin.
Por otro lado, el exjugador y analista Mike Krukow dio en el clavo: más allá del resultado, los verdaderos ganadores serán los fanáticos. Este choque promete ser una de esas series que dejan huella, donde la pasión y la rivalidad se mezclan en cada lanzamiento y cada jugada.
¿Quién saldrá victorioso? Eso está por verse. Pero una cosa es segura: este enfrentamiento tiene todo para ser un espectáculo inolvidable.