Paul Skenes, el impacto desde el montículo que definió el Rookie del Año 2024

La elección de Paul Skenes como el Jackie Robinson NL Rookie of the Year 2024 marcó un claro mensaje por parte de los votantes de la BBWAA: el impacto inmediato desde el montículo pesó más que la consistencia al bate.

El derecho de los Pittsburgh Pirates impresionó con un registro de 11-3, efectividad de 1.96 y 170 ponches en 133.0 innings lanzados, convirtiéndose en un espectáculo obligado cada vez que subía al montículo. Sin embargo, esta decisión generó debate, pues Skenes superó a dos talentos excepcionales: Jackson Merrill de los Padres y Jackson Chourio de los Brewers, ambos jugadores de posición que disputaron 148 juegos en la temporada.

Skenes no solo fue el único de los tres finalistas que debutó en mayo y no estuvo en el roster del Opening Day, sino también el único que no participó en la postemporada. A pesar de estas circunstancias, recibió 23 de los 30 votos al primer lugar, en contraste con los 7 de Merrill, dejando claro que la explosividad de su repertorio de pitcheo fue determinante para los votantes.

Por otro lado, la consistencia de Merrill y Chourio no pasó desapercibida. Ambos ofrecieron aportes diarios que fueron fundamentales para sus respectivos equipos. Sin embargo, este caso reabre la discusión sobre qué criterio debe primar en la elección del novato del año: ¿el mejor talento general o el impacto en el éxito colectivo del equipo?

Lo que está claro es que, en esta carrera histórica por el NL Rookie of the Year, no hubo respuestas equivocadas, pero sí una inclinación hacia el valor del pitcheo como factor diferencial. Skenes no solo se llevó el premio, sino que dejó una huella imborrable en su temporada de debut.


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